¿Qué pasa cuando pierdo un diente?
Las piezas dentarias tratan de recuperar el espacio vacío generando un reacomodamiento. Éste crea espacios donde se acumulan bacterias provocando caries y enfermedades en la encía, movilidad y luego su pérdida. Además daños y dolor en la articulación mandibular, por mal oclusión.
Al comer se pierde comodidad y eficacia masticatoria, así llegan los trastornos digestivos, por no estar correctamente triturados.
Adquiriendo un timbre sonoro característico de las personas desdentadas, de acuerdo a las piezas faltantes.
Gradualmente se percibirá un hundimiento del rostro en las mejillas, por pérdida de apoyo en el diente. Además desaparece estimulación al hueso causando reabsorción, o sea, primero anchura, luego altura y por último su volumen, en un año se puede perder más del 50 por ciento del volumen óseo, es fundamental actuar con rapidez.
Hoy la tecnología y el avance de la ciencia han permitido que la recuperación de la pieza dental sea tan rápida y tan natural que casi sea imperceptible.